Cuando construimos imágenes docker, muchas veces no somos conscientes del poder de la caché integrada. Si reordenamos algunas instrucciones y aplicamos algún truco, podemos evitarnos el hecho de reconstruir muchas de esas capas, llegando a reducir el tiempo de rebuild a prácticamente cero, siempre y cuando no hayan grandes cambios.
A veces nos puede interesar disponer de una servidor DNS para nombrar las máquinas de nuestra red privada, sin la complejidad de BIND. Otras, queremos acelerar el acceso a internet desde nuestra red; es interesante ver el tiempo que se pierde en la resolución DNS. Para eso disponemos de dnsmasq.
Hace tiempo veo que tras usar muchas maquinas virtuales Debian para el uso diario y para las demostraciones de este blog, el ancho de banda usado para bajar los paquetes se dispara. La mayoría de veces se trata de los mismos paquetes, para instalar las mismas aplicaciones, servicios o actualizaciones.