En los anteriores artículos de la serie vimos como montar un entorno entero basado en docker swarm; añadimos un par de servicios de infraestructura básica, como son el balanceador y un cluster de bases de datos. Eran pasos que se hacen una sola vez y raramente se modifican. Ahora toca provisionar aplicaciones, en un proceso que vamos a repetir frecuentemente.